[:es]VE – RA – NO, esa magnifica estación que tanto nos suele gustar. Gusta por sus días de calor y sus noches que, aunque a veces “insufribles”, por no poder dormir debido al calor, invitan a salir, cenar en una terracita, tomar una copa sin prisa y no pensar en las horas que debemos descansar.
El verano sugiere, vacaciones, playa o montaña, días de descanso, de reír, de estar con la gente que más quieres, en esta estación todo se ve y se siente de otra manera. La ciudad dónde vivo que suele estar abarrotada de gente y ruido, parece que se “calma”, que ella también se toma un respiro y está de vacaciones. Poder ir a cualquier restaurante que normalmente es imposible porque no hay mesa para reservar, poder ir al cine y disfrutar de esa película que te apetece tanto ver, ir al trabajo en coche, sin atascos, con los semáforos en verde, eso sólo pasa en verano.
Me encanta mi “paraíso” particular dónde me escapo unos días para dejarme querer con su olor a mar, su clima, sus platos en los que perderse y saborear sin necesidad de mirar el reloj, porque aquí, hasta el reloj parece detenerse. Esos momentos de hamaca mirando al mar, simplemente perder la mirada en su inmensidad, escuchar el sonido de las olas rompiendo en la orilla. Por no hablar de la lectura, en esa época nos “comemos” libros y libros, ya que normalmente durante el año apenas tenemos tiempo para poder deleitarnos en la lectura.
Y el moreno, lo bien que sienta, la piel reluciente, con brillito, no hace falta pintarse, todo nos sienta bien y hasta esos “kilitos” de más que solemos coger, apenas se aprecian. La ropa, los complementos,… todo sienta mejor.
Bueno, disfrutemos pues de los días que nos quedan de esta maravillosa estación, sigamos en modo tranquilo y con buena cara, disfrutando de los días largos, del salir más tiempo, que tanto nos gusta… Para que una vez que se vaya, dejemos paso al otoño, que, aunque no lo parezca tiene también mucho encanto. ¡Seguiremos informando!
By: Mónica Ruiz[:]