Junto con la agencia Grey y la empresa de colchones Durmet, se lanzó al mercado el primer colchón inteligente del mundo capaz de detectar la infidelidad. El objetivo de esta acción era ganar notoriedad de la empresa. La acción fue presentada en Madrid, en el marco del Día Internacional del Beso, para que el público pudiera testear su funcionamiento en las Jornadas de Puertas Abiertas.